
Derechos adquiridos que no debemos ceder
En el mundo analógico -por así decir-, como compradores de libros en papel queda establecida una serie de normas cuya importancia y necesidad social no habíamos posiblemente valorado hasta la aparición de los libros digitales, y que no debemos ceder con la llegada de nuevas formas de acceso a los libros, la información y el conocimiento:
• Cuando compramos un libro en una librería nos convertimos en los dueños de ese producto.
• Nuestros datos de compra no pueden ser reutilizados sin nuestro permiso.
• Nuestro historial de compra no puede ser vendido para fines comerciales (publicidad, etc.).
• Nuestras afinidades lectoras no pueden ser divulgadas a terceros.
• Podemos realizar compras de libros totalmente anónimas pagando en metálico y sin dejar rastro personal alguno de dicha compra.
• Podemos prestar nuestro libro a un familiar, amigo o compañero del trabajo.
• Nuestras notas y apuntes son personales y visibles hasta cuando queramos para quien queramos.
Todos estos derechos de los lectores, que nos son tan habituales con cada compra y so de un libro en papel, deberían garantizarse en el nuevo entorno digital.
No hay comentarios:
Publicar un comentario